Si no te interesa la receta del espresso perfecto pero sí disfrutar de un buen café digno de las mejores cafeterías sin estudiar un “master de Barista”, esta cafetera espresso de Cecotec puede convertirse en tu candidata perfecta.
Esta es una cafetera espresso básica pero con potencial para convertirse en la reina de tu cocina tanto por el café que hace como por su estética. Hemos probado a fondo la Cafelizzia 790 Steel Pro y esta ha sido nuestra experiencia.
La cafetera de Cecotec es interesante para quienes aspiran a tomar un café digno de cafetería pero sin las complicaciones y opciones de los modelos más avanzados. Además, se trata de un modelo relativamente compacto, ideal para cocinas pequeñas y de diseño por su llamativa apariencia.
¿Qué encontrarás en esta guía?
Ficha técnica de la Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro
Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro |
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Dimensiones y peso | 33,6 x 37,6 x 40,6 cm; 3,9 kg |
Potencia | 1.350 W |
Presión | 20 bar |
Tipo de café | molido |
Depósito de agua | 1,2 L |
Manejo | Botones físicos |
Precio |
Diseño compacto y retro
Si tu casa parece sacada de un folleto de IKEA, puede que hayas dado con tu alma gemela con esta cafetera. Porque lo que más nos ha gustado de ella es su estética: es relativamente compacta (para ser un modelo espresso) y tiene un diseño que se mueve entre lo retro y lo industrial.
Se “apellida” Steel porque su chasis es de un atractivo color gris metalizado que recuerda al acero inoxidable propio de las máquinas, pero ya te advertimos que tiene truco: en realidad es plástico.
Y esto no es necesariamente malo. El acero inoxidable es el material usado por excelencia en alimentación por su elevada resistencia a los ácidos, a la corrosión y por su durabilidad. Pero de estar hecha íntegramente de acero, sería mucho más cara. El plástico de su exterior da el pego y además es robusto para el día a día.
Además, no todo es plástico: las conducciones, los filtros, el vaporizador, las bandejas apoyatazas y antigoteo sí que son de acero y con toda la razón del mundo, ya que tendrán que soportar el paso del agua y/o café muy caliente.
Atractivo diseño retro e industrial
Lo más llamativo, estéticamente hablando, de la cafetera es su manómetro con aguja, como si fuera una máquina de las de antes. En tiempos en los que todo tiende a control por voz y paneles táctiles, Cecotec apuesta por lo analógico para darle un toque retro a su cafetera.
Además funciona. Aunque eso sí, su función es más bien estética que para comprobar la presión de la cafetera, ya que no aparecen cifras que sirvan para cuantificarla.
Mientras que los modelos superautomáticos – en los que no tienes que preocuparte por casi nada – son voluminosos, esta cafetera tiene unas dimensiones más modestas que encajarán mejor en la mayoría de pisos.
Eso sí, tendrás que preocuparte más a menudo de llenar el depósito de agua. Y las tazas que caben, ya sea en el apoyatazas o bajo el surtidor, son de tamaño pequeño o medio. Y es que aunque el surtidor tiene dos salidas, permitiendo hacer dos cafés a la vez, tienes que estar pendiente de poner bien las tazas para que quepan y no se salga el café.
Nos han decepcionado un poco los acabados y el mecanismo para fijar el depósito, ya que resultan algo toscos. A su favor, puedes llenarlo ya sea acercando una jarra y abriendo la tapa o sacándolo entero para ponerlo bajo el grifo.
Si te gustan los cafés con espuma, agradecerás el vaporizador que incluye en un lateral, perfecto tanto para capuccinos como para calentar la leche o el agua para infusiones. Eso sí, es algo pequeño y solo puedes girarlo un poco, lo que limita tu capacidad de operación.
Un portafiltros de calidad y con truco
Una de las piezas mejor diseñadas de esta cafetera es el portafiltros. Está compuesto por un robusto y ergonómico mango de plástico y una cabeza de acero. En su interior hay espacio para que coloques los dos filtros que incluye, uno si solo quieres hacer una taza de café y otro doble para hacer dos.
El mecanismo de ajuste entre el portafiltros y el grupo de café va un poco duro, por lo que necesitarás más maña que fuerza para colocarlo adecuadamente. Como es una cafetera más bien pequeña y ligera, es fácil que la muevas un poco pese a tener cuatro ventosas en la base.
En cuanto al control no puede ser más sencillo: solo cuatro botones con un ícono serigrafiado y una ruleta que hará que, incluso aunque nunca hayas tocado una cafetera, en pocos minutos te apañes para ponerla en marcha y hacerte un café.
Manejo muy fácil
Aunque viene con libro de instrucciones, es tan fácil de usar que a nada que estés familiarizado con este tipo de pequeños electrodomésticos, ni siquiera necesitarás abrir el manual.
En la parte superior de la cafetera se encuentran el típico botón para apagar y encender, dos botones para que te hagas uno o dos cafés y finalmente el botón para activar el vaporizador. Hasta aquí todo normal. Pero tiene “truco”.
Cuando el botón esté iluminado de forma continua, entonces puedes accionarlo para que entre en acción (por ejemplo, para hacer un café), pero si está parpadeando, significa que está en proceso y no responde, algo que sucede cuando la enciendes y está en el calentamiento inicial o cuando está preparando un café.
Esto sobre el papel, porque en la práctica a veces los botones de la cafetera se quedan parpadeando y la cafetera no responde, se queda bloqueada. Esto sucede de vez en cuando, por ejemplo cuando usas el vaporizador durante un rato y la cafetera se calienta tanto que necesita unos minutos para bajar de temperatura. En un caso extremo, apágala, desconéctala y vuélvela a encender.
Puesta a punto: rápida y simple
Una vez la sacas de la caja y le retiras el plástico protector, ponerla en marcha es bastante rápido y simple. Solamente tendrás que llenar el depósito de agua, algo que puedes hacer, o bien abriendo la tapa y usando una jarra o botella, o bien sacándolo y metiéndolo bajo el grifo.
Un consejo: aunque puedes usar agua del grifo, es recomendable, para evitar obstrucciones, que emplees agua de mineralización débil, ya sea mineral o filtrada en una Brita o similar.
Teniendo en cuenta que es nueva y que no dispone de un sistema de autolimpieza, merece la pena que la primera vez que la enciendas pulses el botón para hacer uno o dos cafés (ni siquiera hace falta que pongas café) para que el agua atraviese los circuitos para limpiarlos.
A partir de este momento, ya estará lista para la acción.
Haciendo café
Como esta cafetera no muele café, el punto de partida es café molido. Así que tienes dos opciones: o bien lo compras molido o, si quieres que pierda cuanto menos propiedades organolépticas, mejor, hazte con un molinillo y muélelo al momento.
Después coloca el filtro en función del número de tazas que vayas a hacer: el pequeño si solo quieres un café, o el doble, para dos. ¿Por qué colocar dos filtros en lugar de solo uno y dar la opción al usuario de llenarlo menos?
Por comodidad: si llenas el filtro con ayuda del cacillo-prensa que incluye y lo presionas levemente, sale un buen café, ni muy concentrado ni aguado. No obstante, si te gusta el café fuerte siempre puedes optar por usar el filtro doble y luego hacer únicamente un café.
La Cafelizzia 790 Steel Pro calienta el agua mediante sistema Thermoblock en unos 40 segundos y dispone de 20 bares de presión (teórica) para preparar el café.
Y se nota: tienes un café listo en aproximadamente un minuto con una intensidad, cuerpo y espuma superior al que harías con la clásica cafetera de cápsulas. Y bastante mejor que muchas cafeterías.
Café listo con un solo botón
Si te gusta el café y te gustaría descubrir todos sus secretos, esta cafetera se te quedará corta pronto, ya que solo permite jugar con los filtros o modificar la cantidad de agua empleada por café, pero no puedes modificar la temperatura de operación o la intensidad de café con cierta precisión y reproducibilidad.
Pero si no te interesa ir de barista por la vida, con ella podrás hacerte un buen café sin complicarte con temas de presión, temperatura o grado de molienda.
Además de café solo, con esta cafetera puedes prepararte cafés con leche o capuccinos gracias a su vaporizador. Y si simplemente quieres calentar agua para una infusión, también puedes. Eso sí, ármate de paciencia: le cuesta bastante calentar la leche o el agua, se nota que es un vaporizador básico.
Su vaporizador es pequeño, funciona bien y puedes girarla 90 grados para proceder cómodamente, por lo que tendrás que limitarte a mover la jarra con la leche en movimientos verticales de arriba a abajo durante algunos minutos. Pero es tan lenta y básica que te sabrá a poco si haces café con frecuencia.
Su mantenimiento y limpieza llevan algo de tiempo
El atractivo exterior con efecto espejo metalizado de esta cafetera tiene un peaje a pagar: es un auténtico imán para las huellas, por lo que en poco tiempo verás cómo la grasilla de tus dedos deja mancha sobre su superficie.
Afortunadamente la limpieza externa es de lo más sencilla: basta con usar un paño seco o ligeramente humedecido y unas pasadas para dejarla impoluta. Del mismo modo, extraer la bandeja apoyatazas con el depósito inferior es coser y cantar, de modo que puedas limpiar las gotas y restos de café que caen con el uso.
Si usas el vaporizador para calentar o espumar la leche, te recomendamos que inmediatamente después lo pongas en marcha en un vaso de agua para enguajarlo y que no queden restos. Por fuera, de nuevo podrás usar un paño humedecido.
Un poco engorrosa de limpiar
Lo peor de limpiar esta cafetera está en el portafiltro y su respectivo filtro: cada vez que hagas café tendrás que extraerlo, retirar el filtro y usar el tubo metálico para retirar los posos en una tarea que, sin ser especialmente complicada, sí que te llevará unos valiosos minutos para dejarlo limpio con agua. Después, tendrás que secarlo antes de volver a usarlo.
Para nosotros este es el principal hándicap de esta cafetera: prepara cafés bastante buenos, pero tener que invertir un tiempo en limpiarla con cada uso hace que, por ejemplo, no sea la mejor opción como cafetera de diario para esas personas que se levantan con el tiempo justo antes de ir al trabajo.
Finalmente ten en cuenta que la cal del agua puede obstruir las conducciones, por lo que cada cierto tiempo tendrás que comprar un descalcificador para limpiarla por dentro. No obstante, también puedes optar por añadir un buen chorro de vinagre para una descalcificación casera.
Nuestra conclusión
Existe todo un mundo alrededor del café: fascinación por el sabor y sus matices, la “necesidad” de una dosis de cafeína y, por qué no, también un poquito de postureo. Si te gusta el café, buscas algo más auténtico que las cápsulas pero no quieres complicarte o invertir en una cara y voluminosa superautomática, esta Cafelizzia 790 Steel Pro es una buena candidata.
Con esta cafetera no será necesario que te aprendas la receta del auténtico espresso, si no que simplemente tendrás que preocuparte por llenar el filtro con tu café favorito ya molido (o hacerte con un buen molinillo para molerlo tú), pulsar un botón y colocar una o dos tazas debajo.
En este sentido, no podrás ajustar parámetros como la temperatura, la intensidad del café o el grado de molienda, pero entre que calienta el agua a la temperatura adecuada, la alta presión a la que somete la infusión y que los filtros están dosificados para una o dos tazas, el resultado es un buen café con cuerpo, aroma y espuma que poco tiene que envidiarle al de muchas cafeterías.
Eso sí, no es una cafetera para que aprendas los secretos del espresso o para usar a diario salvo que tengas tiempo, porque limpiarla cuesta lo suyo y tendrás que hacerlo cada vez que la uses.
Pero si quieres hacerte un buen café de vez en cuando y las cafeteras italianas o las de cápsulas te saben a poco, esta es una cafetera que destaca por su facilidad de uso y por su estética. Porque esta es una cafetera relativamente compacta que entra por los ojos, ideal para hogares de diseño.
Teniendo en cuenta lo buenos que salen sus cafés, consideramos que su relación calidad precio es adecuada. No obstante, es momento de compararla con cafeteras express de similares prestaciones para conocer cuál es su posición en el mercado.
Cecotec cuenta en su cartera de productos con unas cuantas cafeteras de prestaciones similares que pueden interesarte. Si por ejemplo prefieres un modelo con estética más moderna, más grande y más automatizado, la semiautomática Power Instant-ccino 20 Chic (ver precio) es una alternativa a tener en cuenta. Eso sí, en este caso tendrás que gastar más dinero y carece de vaporizador en favor de un depósito para calentar la leche de forma autónoma.
Si prefieres pagar menos y un diseño más clásico, la Manual Power Espresso 20 Professionale (ver precio) es más grande, pero cuenta con la misma presión de trabajo y vaporizador. Eso sí, es menos potente y carece de sistema Thermoblock para calentar, por lo que cabe esperar unos resultados más modestos.
Fuera del catálogo de la firma valenciana encontramos la De’longhi Dedica (ver precio), una cafetera con una estética igualmente industrial y compacta y muy similar en prestaciones. Además de pagar la marca (toda una institución en este mundo), este modelo está hecho de acero inoxidable y cuenta con un vaporizador más completo.
Otra alternativa de una marca de referencia es la Krups Virtuoso (ver precio), una cafetera con un diseño muy cuidado y de calidad, algo más compacta y potente con el que preparar café a partir de molido y cápsulas. Eso sí, si apuestas por este diseño más premium y superior en prestaciones, tendrás que pagar casi el doble.
De precio similar es la Gaggia RI8423 (ver precio), una marca clásica y bien conocida para los cafeteros. A su favor, un diseño de calidad y tan fácil de usar como la Cafelizzia, si bien sus prestaciones en cuanto a potencia, depósito o presión de operación son inferiores.
Valoramos sus Pros y Contras
- Diseño elegante
- Calentamiento rápido
- Es asequible
- Fácil de usar
- Limpieza poco práctica
- A veces se bloquea
- Vaporizador básico
- Pocos ajustes
Comparativa con otras cafeteras espresso
Nota: si usas el móvil, desplaza la tabla con el dedo para ver todas las columnas.
Cecotec Cafelizzia 790 Steel Pro | Power Instant-ccino 20 Chic | Krups virtuoso | Gaggia RI8423 | Power Espresso 20 Professionale |
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Dimensiones y peso | 33,6 x 37,6 x 40,6 cm; 3,9 kg | 33 x 14.9 x 30.3 cm; 4,21 kg | 33 x 42 x 48 cm; 4,45 kg | 28 x 14.3 x 28.5 cm; 3,3 kg | 20 x 29,70 x 26,50 cm; 4 kg | 23,9 x 40,2 x 29,1 cm; 3,8 kg |
Potencia | 1.350 W | 1.350 W | 1.470 W | 1.450 W | 950 W | 850 W |
Presión | 20 bar | 15 bar | 20 bar | 15 bar | 15 bar | 20 bar |
Depósito de agua | 1,2 L | 1,3 L | 1,7 L | 1,1 L | 1,1 L | 1,5 L |
Calentamiento | Thermoblock en 40 segundos | Thermoblock en 35 segundos | Thermoblock en 35 segundos | Thermoblock en 40 segundos | n.d. | n.d. |
Manejo | Botones físicos | Botones físicos | Botones físicos | Botones físicos | Botones físicos | Digital |
Tipo de café | Molido | Molido y monodosis | Molido y monodosis | Molido y monodosis | Molido | Molido |
Vaporizador | Sí. Giro 90 grados | Si. Giro 360 grados. | No. Con depósito de 0,7L | Sí | Sí | Sí. Giro 90 grados |
Precio |
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